martes, 30 de agosto de 2011

El Principio


Dos griegos estan conversando: Sócrates acaso y Parménides. 
Conviene que no sepamos nunca sus nombres; la historia, así, será más misteriosa y más tranquila.
El tema del diálogo es abstracto. Aluden a veces a mitos, de los que ambos descreen.
Las razones que alegan pueden abundar en falacias y no dan con un fin. 
No polemizan. Y no quieren persuadir ni ser persuadidos, no piensan en ganar o en perder.
Están de acuerdo en una sola cosa; saben que la discusion es el no imposible camino para llegar a una verdad.
Libres del mito y de la metáfora, piensan o tratan de pensar. No sabremos nunca sus nombres.
Esta conversación de dos desconocidos en un lugar de Grecia es el hecho capital de la Historia. J.L. Borges